Un amor legendario que atravesará el tiempo.
Cuando el reputado arqueólogo Henry Donovan fallece, los extraños sueños de su hija se vuelven cada vez más recurrentes. Melanie no sabe qué va a hacer con su vida. Su mundo se ha vuelto patas arriba y, para colmo, ha conocido al inquietante Ryan, quien termina de trastocar su confusa mente.
El reencuentro de dos corazones que ni siquiera la muerte podrá detener.
Ryan viaja hasta Nueva York para solicitarle unos importantes documentos a la hija del difunto profesor. Todo se complica tras el asombroso descubrimiento de Melanie, al darse cuenta de que su padre no solo investigaba tumbas en Egipto, sino que andaba detrás de la pista de un secreto milenario del que el atractivo Ry y ella misma son protagonistas.
Buenos días infinitos, ya estamos en el ecuador de la semana y hoy os traigo una nueva reseña. Me la leí porque me llamó la atención y además vale para otros retos.
Mezcla romántica, historia, con fantasía o paranormal.
Hay dos líneas de tiempo, la parte de Alejandría del año 30 a.C y Nueva York del 2018.
Conoceremos a Ryan, es un arqueólogo y también algo más. Tengo que decir que no me cayó muy bien, es bastante posesivo y celoso, se le podría entender pero no, no es normal.
También está Melanie, una joven que pierde a su padre y todo su vida dará un giro inesperado.
Me he encontrado amor verdadero, buena conexión entre los personajes, buenos secundarios, aunque hay pocos giros inesperados, la mayoría son predecibles. La historia es original.
Hay gran parte de documentación sobre el tema egipcio, y también de las excavaciones.
La evolución de la historia es bastante lenta, salvo el final que es demasiado rápido. Y me ha faltado algo de chispa.
En resumen, es una historia sencilla, fácil de leer, que os recomiendo.
Valoración: 3'5/5
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