

Irina Beltrán y Rosario Alarcón no tienen nada en común. O eso creían ellas.
Irina es inspectora de policía, firme, directa, con una determinación inquebrantable.
Rosario es una periodista que lleva años sin destacar, sensible, hambrienta de una gran historia.
Son polos opuestos… hasta que aparece un cadáver abandonado en un oscuro callejón de Madrid.
Ambas mujeres harán todo lo posible por descubrir al culpable. Iniciando una investigación que las enfrentará a un asesino en serie y las obligará a adentrarse no solo en el lado más cruel del ser humano, sino también en los rincones más oscuros de sí mismas.